E
rling Haaland se lesionó en el peor momento posible, cuando los equipos empiezan a jugarse cosas, y su selección se jugaba su clasificación al Mundial. La ausencia del noruego pesa mucho, y si la anterior semana se quedó fuera de la Copa del Mundo, ahora le tocó quedarse sin Champions.
Y lo peor es que el delantero del Borussia Dortmund lo ha tenido que ver desde afuera, sintiendo la impotencia de que quizás, con él en cancha, la historia hubiese sido diferente, solamente con su presencia goleadora.

El equipo alemán dio pena en su visita a Lisboa, ante el equipo de Gonzalo Plata, ya que todavía el 'tricolor' pertenece a dicho club. El Sporting salió a 'comerse' a su rival y lo asfixió al punto de tenerlo contra las cuerdas.
Su estrella, Pedro Gonçalves, marcó los dos primeros goles y pudo hacer el tercero de penal, pero en el rebote su compañero Pedro Perro hizo el 3-0.
El Dortmund necesitaba 2 goles para mantener la esperanza de la clasificación, pero el equipo jugaba sin alma. Marco Reus era el único que intentaba algo, y asistió a Mallen para poner el 3-1.
Faltaba 1 gol para que el Borussia vuelva a la 'vida', pero la reacción fue muy tarde. El Sporting mantuvo el 3-1 y selló como segundo su pase a los octavos de final. El 'villano', Rubén Amorim, volvió a salirse con la suya con un equipo que tiene un funcionamiento y equilibrio interesante, y que está entre los 16 mejores de Europa.